Letras extraviadas

Cuando escribo me nacen alas, por eso mi lugar está entre las nubes.

Fumándome tu vida – 19/02/13

Un cigarro y una noche
Sólo dos encuentros, pero cuántos recuerdos…
Aseguro que intento
Pero es que te siento… Y lo siento.

Dos pieles sin si quiera conocerse
Parece una locura tanto «amor»
Quizás más ilusión
Leí una vez del poeta Benedetti, que los amores eternos, son los más breves… Y sí así fue

Fugaz… Un viento que azotó mi vida
Que se adentraba por mis poros
Me alimentaba los sentidos
Y le quitaba un poco lo amargo a mis días

Pero… Se nos escapó de las manos
Huyeron las historias al baúl de las cenizas
No sé si tú las tendrás presentes
Pero yo las leo cada noche, antes de «viajar al cerrar los ojos» como me dijiste alguna vez…

Fue poco el tiempo, pero al menos en mí, hiciste mucho
Y muchos también fueron los besos, pero nunca suficientes
Fuiste un viajero… Mi viajero
Pero realmente, nunca me perteneciste…

Sin intercambio de palabras
Pero es necesario que sepas que te pienso como nunca y como siempre
Mas fui yo quien te dijo adiós
Tú nunca diste una respuesta…

Sólo sé que ahora no estás
Y parece ni siquiera ser de tu interés
Quizás nunca lo fue
Especulaciones

Aventuras y tu sonrisa
Peligro y tu espalda
Mis ojos en tus pecas
Espejismos…

Muchas veces me he resignado
Pero te digo, es difícil no seguir atada a tu esencia
Me llama… Me conmueve con memorias
No cedo aunque me muero por hacerlo.

33 noches desde aquella noche que no quise hacerme más daño
Retazos de realidad habitan en mí
Así como cuando tus palabras jugaban con mis sentidos
Sueños reflejados en tu mirada

En tus ojos… Ése mar que no puedo ver
Pero que puedo en él ahogarme
Sería agradable que estuvieras presente en estas letras
Literalmente lo estás, pero lo no sabes
Porque quizás, ya ni te importa.

Hay mucho que me quedó por decirte
Hay noches en las que nos faltaron los sueños
Hay historias que no escribimos
Hay días que no se encendieron
Hay deseos que se escondieron
Hay vida, está mi vida y está tu vida…
Hay un cigarro y estoy yo
En la misma orilla del mar que tú, pero en el otro extremo
Sentada con las olas chocando en mis pies

Y yo… Intentando fumarme tu vida
A ver si se me esfuma…
A ver si se me olvida…

Si quizás se me deshace entre los dedos
Pero parece ser interminable

Así fuiste,
Demasiado…

Así es sacarte de mí,
Difícil…

Así fuimos
Breves.

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Escrito por: Rocío N. Matute C.

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Esta entrada fue publicada en 20/02/2013 por .